Trudeau asume “poderes de emergencia”: Canadá podrá congelar cuentas bancarias de quienes protesten contra el gobierno
El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, invocó “poderes de emergencia” para poner fin a las protestas de camioneros que se niegan a aceptar el mandato de inoculación obligatoria contra el Covid-19, que les impide trabajar con normalidad.
“El gobierno federal ha invocado la Ley de Emergencias para complementar la capacidad provincial y territorial de hacer frente a los bloqueos y ocupaciones”, dijo Trudeau en una conferencia de prensa, y agregó que en esta etapa no se desplegarían militares.
La Ley de Emergencias otorga al Gobierno federal poderes extraordinarios, incluido el derecho de prohibir los viajes desde o dentro de cualquier área específica y de requisar la propiedad que considere necesaria para manejar la situación.
La ley también permite al Gobierno ordenar la prestación de “servicios esenciales” por parte de cualquier persona e imponer multas de emergencia o prisión por violar las órdenes. Nunca se ha utilizado desde que se promulgó en 1988, ya que requiere una “situación urgente y crítica, de carácter temporal, que ponga en peligro la vida, la salud o la seguridad de los canadienses”, según un memorando del Gobierno sobre la legislación.
El Gobierno de Trudeau se ha enfrentado a una presión cada vez mayor para intervenir, luego de casi veinte días de protestas contra los mandatos de inoculación y otras restricciones por el Covid-19. Las manifestaciones aumentaron este fin de semana y se extendieron al puente que transporta una cuarta parte del comercio de Canadá con Estados Unidos, su mayor socio comercial.
Varias provincias ya han anunciado planes para deshacerse de las restricciones por el Covid, pero Trudeau ha mantenido los mandatos de inoculación que están bajo el control de su Gobierno, incluidos los de los trabajadores del Gobierno federal, los viajeros aéreos y los camioneros que ingresan al país desde EEUU.
La viceprimera ministra de Canadá, Cristina Freeland, anunció por su parte que el gobierno podrá congelar las cuentas bancarias de los camioneros que protestan, así como suspender sus pólizas de seguros. Tamaña medida prueba una vez más el grave riesgo para la libertad de la persona humana que implican los proyectos en marcha de digitalización total del dinero, dejando a cada ciudadano completamente inerme frente a la arbitrariedad política de los gobiernos.